domingo, 3 de noviembre de 2019

4 Movimientos sociales - Formas emergentes de lo social.


Los movimientos sociales en red: ¿promotores efectivos del cambio? 


Palabras clave: Movimientos sociales; Ciberactivismo; Cambio social.

Introducción


Intentar decir algo distinto sobre la propuesta de M. Castells, autor base del tema, corresponde a quienes como Brym, et al.  (2018) están dedicando su trabajo hacia líneas de investigación que pretenden conceptualizar, delimitar o proyectar, la explosión de movimientos sociales organizados a través de la red. 

Este ensayo solo se pretende exponer algunas ideas de expertos en disciplinas distintas o con otra tendencia a la de Castells, en el marco que la UNIVA nos contiene y en el que lo propiamente humano y en la cosmovisión cristiano católica tiene cabida.

Así,  la pregunta a la que se intenta dar respuesta se refiere a los resultados que se obtienen con el uso masivo de las redes sociales a través de Internet en los que se prescinde de la presencia física de los responsables; por tanto, ¿realmente son efectivos al punto de considerarlos sustitutos de las acciones de los 60´s y posteriores, en los que la presencia humana agrupada (con orden o sin orden) provocó cambios históricos?

Es un hecho que tienen un impacto y Castells lo ilustra con distintos casos en el mundo; la tecnología de la comunicación tiene un lugar especial en nuestro tiempo. ¿Es suficiente con reunir millones de firmas electrónicas o millones de likes para denunciar algo/alguien? ¿Y quién actúa para que el cambio suceda?  

Hay uno o varios autores intelectuales, anónimos, con pseudónimo o su nombre oficial individual o de grupo; ¿ellos mismos se convierten en autores materiales?
     

"La comprensión de los movimientos sociales en red como precursores del cambio social en el siglo XXI" (Castells (2012: 34)



Ortíz Galindo (2016: 169) define al "movimiento social” como sigue:
Actor colectivo, inmerso en un conflicto social, que actúa con cierta continuidad, normalmente estructurado en forma de red, para sensibilizar a la opinión pública y conseguir exigir a su adversario, de forma consciente y organizada, unos objetivos de carácter público y acordes con su identidad colectiva, para afectar al cambio social (promoviéndolo u oponiéndose a él).
Algunos ejemplos que en la literatura se reportan como parte de la historia mundial de este tipo de movimientos, además de Ortíz Galindo también los mencionan el mismo Castells,   Brym, et al.  (2018), Daubs, M.S. (2017), Dolata, U. (2017), Ismail, A. (2016), Stojadinovic, M. (2017). Lo sucedido en Indonesia y el Ocuppy Wall Street, entre los más mencionados.

En México y sobre uno de los movimientos de este tipo,  el #YoSoy132,  movimiento más bien del ambiente de la política y que ha sido estudiado por Torres Nabel (2015), reporta entre sus consideraciones finales la siguiente propuesta: 


...una línea de investigación futura [que] trate el fenómeno del #YoSoy132 más como una campaña política que como movimiento social, donde los actores y sus roles están más orientados a la influencia mediática que a crear capital social útil en la acción colectiva de largo aliento.
Torres Nabel (2015) como Brym, et al. (2018) tienen razón en cuestionar la propuesta de Castells al referirse a los movimientos sociales como "redes de indignación y esperanza" ya que, en los medios de comunicación digital, horizontales o verticales, más bien son escenarios de lucha política en los que los recursos ($) y la creatividad y hasta las pasiones, pueden conducir a resultados imprevistos.   


Todos los autores citados y los que sigan en la línea de investigación sobre los movimientos sociales que usan la Internet/WWWeb o ciberactivismo, algo bueno le encuentran y quizá ellos como el mismo Castells alberguen la esperanza de que muchas de las iniciativas lleguen o llegaran al cambio social por el que surgieron/surgen. 

¿Qué podría estar faltando?   


#RealSocialChange


La vida en general es un cambio continuo y constante; la vida humana en lo individual y en lo colectivo, en sus interacciones, dice Morin (1994: 41),  

...producen a la Sociedad, la cual produce a los individuos que la producen. Eso sucede en un circuito espiralado a través de la evolución histórica. Esta comprensión de la complejidad requiere un cambio muy profundo de nuestras estructuras mentales. El riesgo, si ese cambio de estructuras mentales no se produce, sería el de ir hacia la pura confusión o el rechazo de los problemas. No está el individuo por una parte, la Sociedad por otra, la especie de un lado, los individuos del otro, de un lado la empresa con su organigrama, su programa de producción, sus estudios de mercado, del otro lado sus problemas de relaciones humanas, de personal, de relaciones públicas. Los dos procesos son inseparables e interdependientes.

J. Marías (1955: 20), en su obra publicada antes de los 60's, dice sobre lo social: 

...la única realidad efectiva en una sociedad es la de las vidas individuales, pero a éstas les pasa necesariamente la sociedad, esto es, son constitutiva e intrínsecamente sociales. Las interpretaciones de las cosas, su articulación en una figura de mundo, el lenguaje, los usos, creencias e ideas que me constituyen en mi realidad personal son ingredientes sociales de ella, cuya razón se encuentra sólo en la vida colectiva.

Si lo colectivo o social no puede prescindir de lo individual, ¿será entonces lo individual lo que está quedando fuera de las determinantes para el cambio social y que es lo que se espera (esperanza) desde el momento en que empieza a surgir la primera manifestación de  un #TodosSomosMéxico o #ElQueSea?

Marías (1955: 278) cuando habla de la vida social de su tiempo, dice lo siguiente:

Cada   individuo  ve  cierto   número   de  personas.  Una   gran   parte  de  ellas  las  ve  simplemente:  son  los  desconocidos  a  quienes  encuentra  en  la  calle, ... Otra  porción  está  compuesta  por  personas  a  quienes  ve  y,  por  ejemplo,  saluda: son  los  meros  conocidos,  vecinos,  etc.,  con   quienes   «tropieza»   ocasionalmente  porque  se  cruzan  sus  trayectorias  vitales  respectivas.  Un  tercer  grupo  está  formado  por  las  personas  a  quienes  trata,  es  decir,  aquellas  a  quienes  se  vuelve  con  actos  concretos  de  convivencia...Esta  última  fracción  encierra  zonas  muy  diversas;  habría  que  filiarlas  teniendo  en  cuenta  la  frecuencia  y  la  proximidad  del  trato:  hay  personas  a  quienes  se trata  una  vez  al  año;  otras,  cada  dos  meses; otras,  todas  las  semanas;  algunas,  a  diario;   y,  con  relativa  independencia  de  esto,  en  diversos  grados  de  intimidad.   


¿Cuánta intimidad como la que menciona J. Marías puede lograrse en las conexiones/relaciones sociales a través de la Internet?  ¿O porque estamos en el Siglo XXI ya la necesidad de la intimidad humana ha sido superada? 


Conclusiones


Si los movimientos sociales que la historia de la humanidad identifica ya como tales desde la década delos 60's del siglo pasado y hasta los más recientes que incorporan Internet y la web social, tienen como característica originaria el conflicto, ¿significa que tal, el conflicto, deriva de las presiones y resistencias naturales del movimiento y a las que se refiere Marías (1955: 34-35), naturales o propias en la vida humana y hasta necesarias para su evolución? 

Los movinets (Prieto, 2016), con su tecnología integrada y su capacidad para hacer circular ideas entre diferentes esferas de la realidad, tienen el potencial de alterar la dinámica de la movilización social, sin duda.  Schumann, S. (2015), dice que los partidarios aprecian especialmente la transferencia de información, pero ello no contribuye a su sentido de participación.

Reflexionando sobre los primeros términos de la definición de Ortíz Galindo (2016) sobre los movimientos sociales, sin nada de teoría científica de mi parte y con solo mi aprendizaje de los temas previos del curso, me lleva a considerar que un conflicto social, colectivo, inicia con un sujeto inconforme o a disgusto con algo; alguien que no vive pleno ni en paz.
Cuando una persona no se encuentra en paz, a veces, su modo de decir eso es quejándose y protestando ya no solo en lo privado sino de modo público.

Las redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram y cuanta aplicación en la plataforma de Internet se pueda desarrollar son herramientas de comunicación en nuestra época y que pueden facilitar y estrechar la convivencia humana a distintos niveles y entonces, facilitar la participación en asuntos de interés común y que se encaminen al desarrollo de oportunidades en pro de un nivel más alto de desarrollo humano. Tal es lo que todos esperamos.

Hasta ahora y mientras la humanidad siga siendo humana, necesitada de retos y de oportunidades de desarrollo individual y colectivo los medios como la Internet serán eso, medios y no fines. Quienes las usen, han de requerir de una serie de cualidades humanas que les permitan cumplir con su cometido y no ceder a las presiones de las conveniencias, de la cultura de la hipocresía o de las propias frustraciones.

Las instituciones como la familia siguen siendo el medio adecuado para atender a cada persona desde su origen y llevarlo a la ciudadanía responsable, capaz de comprometerse con los retos de su tiempo y asumir las consecuencias de sus actos individuales y como miembro de la sociedad y de la humanidad entera. Esto es orden individual y social, esto es moral privada y pública, esto es naturaleza humana.


Referencias


Brym, R., Slavina, A., Todosijevic, M., & Cowan, D. (2018). Social movement horizontality in the Internet Age? A critique of Castells in light of the Trump victory. Canadian Review of Sociology-Revue Canadienne de Sociologie,  55(4): 624-634. 
DOI: 10.1111/cars.12219

Castells, M. (2012). Redes de indignación y esperanza. Madrid: Alianza editorial.

Daubs, M.S. (2017). The myth of an egalitarian Internet: Occupy Wall Street and the mediatization of social movements. International Journal of Digital Television, 8(3), 367-382.  DOI: 10.1386/jdtv.8.3.367_1

Dolata, U. (2017). Technically advanced sociality. Social movements and the Internet. Zeitschrift fur Soziologie, 46(4): 266-282. DOI: 10.1515/zfsoz-2017-1015 

Ismail, A. (2016). Tweeting and Click: Internet and New Social Movement in Indonesia. En:
Proceedings of the International Conference on Ethics in Governance (ICONEG 2016). Edited by: Wekke, I.S. et al. Book Series Title: Advances in Social Science Education and Humanities Research, 84: 69-73.

Marías, J. (1955). La estructura social: teoría y método. Madrid: Sociedad de Estudios y Publicaciones.

Morin, E. (1994). Introducción al pensamiento complejo. Madrid: Gedisa.

Ortiz Galindo, R. (2016). Los cibermovimientos sociales: una revisión del concepto y marco teórico. Communication & Society29, (4), 165-183. 
doi: 10.15581/003.29.4.sp.165-183www.communication-society.com

Prieto, R.R. (2016). The Internet as opportunity and challenge in contemporary social movements. Teknokultura: Revista de Cultura Digital y Movimientos Sociales, 13(1): 289-307. DOI: 10.5209/rev_TK.2016.v13.n1.51930

Schumann, S. (2015). How Cause-related, Advocacy, and Social Movement Organizations Use the Internet to Promote Collective Actions. En: How the Internet shapes collective actions. Book Series Title: Palgrave Studies in Cyberpsychology.
Book Series Title: Palgrave Studies in Cyberpsychology, p. 46-53.
Book DOI: 10.4337/9780857935854 

Stojadinovic, M. (2017). Transnational social movements in the Internet Era: The case of "Avaaz".
Sociolojica, 59(4): 497-517. DOI: 10.2298/SOC1704497S 

Torres Nabel, L.C. (2015). ¿Quién programa las redes sociales en Internet? El caso de Twiter en el movimiento #Yosoy132 México. Revista Internacional de Sociología, 73 (2), 
doi: http://dx.doi.org/10.3989/2013.05.29.

domingo, 27 de octubre de 2019

3 Instituciones

Instituciones: estructura y control social



Palabras clave: Instituciones; Agrupaciones humanas; Control social.


Es un reto tomar una postura ante tantos factores importantes que "dan vida" a las instituciones y sobre su influencia pasada, presente o futura en la vida social. 

Elster (2010), Foucault (1975) y Giddens (2011), entre los autores asignados para desarrollar el tema y quienes aportan interesantes ideas y conceptos al conocimiento de la dimensión social humana, me han puesto a revisar  y recordar con el detalle posible algunos de los ejemplos que usan para ilustrar la complejidad de la interacción humana y que, como lo registra la historia y la sociología, entre otras, pese a la evidencia de los hechos y situaciones es arriesgado emitir un juicio de valor. Sin embargo, tanto en lo individual como en lo colectivo o grupal, es conveniente hacerlo para no repetir errores.

Una extracción de los textos y para los fines de esta actividad son los siguientes:

J. Elster
Las normas sociales como “conminación a actuar/no actuar”. Ejemplo: Vestir ropa color negro para asistir a un funeral. (p. 386). 
¿Normas que regulan el comportamiento y que equivale a actuar/no actuar, por el ¿qué dirán?
“Cultura de la hipocresía”; “La ignorancia pluralista” = “Nadie cree en “X” pero todos creen que todos creen en “X” (p. 410-11)
“La toma colectiva de decisiones, como votar o no, repercute en “la elección de un curso de acción” (p.435)

M. Foucault
“El Panóptico es un lugar privilegiado para hacer posible la experimentación sobre los hombres y para analizar con toda certidumbre las transformaciones que se pueden obtener en ellos" (p. 207)

A. Giddens
“Los seres humanos emergen de la <<nada>> de la naturaleza inorgánica y desaparecen en ese estado inorgánico…” (p. 222)

El lado obscuro que miran y detallan los tres autores sobre las relaciones grupales entre humanos, sin duda que nosotros también lo vemos y quizá hasta hemos sido partícipes. ¿Es así?...¿nos agrupamos sólo para complicarnos la existencia? Definitivamente que no. Sin embargo, cualquiera que, como Giddens, considere que “surge de la <<nada>> inorgánica y allí mismo desaparece”, ¿qué posibilidades hay de que mire su lado de luz?



Valor de las instituciones y su papel en la reproducción, el control social y la toma de decisiones en los grupos humanos



J. Marías (1955:24), como Elster (2010), la mera agrupación de seres humanos no es una sociedad; los usos,  las creencias,  las ideas,  las estimaciones,  las pretensiones, entre otros componentes, son lo que conforman una sociedad.

Luego, el mismo Marías se refiere a las vidas humanas como:
...los elementos reales de la sociedad [que] no son «cosas» estáticas, sino presiones, pretensiones, insistencias y resistencias, con las cuales se realiza la «consistencia» de la unidad social. Todos sus ingredientes «vienen de» y «van a», están en movimiento efectivo (p. 34-35).


Así, las estructuras sociales se pueden entender (bajo la la misma perspectiva de Marías) como fuerzas variables en intensidad y dirección, en movimiento; que al mismo tiempo que conservan, anticipan. Las estructuras sociales son <<antiguas>> porque conservan aunque al mismo tiempo inestables o innovadoras (futuro). 

Una ciudad o varias, son ejemplo de la estructura social de un país o zona geográfica de mayor dimensión. Al interior de las ciudades hay también estructuras de tipo económico, educativo, de gobierno, etc. 

Elster (2010:461), en su capítulo 26 sobre las organizaciones y las instituciones, señala a la justicia transicional como ejemplo institución y define a éstas, las instituciones, como maneras de hacer las cosas. 

Ratzinger (2000:27) se refiere a la libertad, la justicia y el bien como principios morales de las sociedades democráticas y precisamente para que la democracia relativista de nuestro tiempo vaya más allá del beneplácito mayoritario o de los apoyos suficientes en número, hasta para enviar a la muerte a un justo.  

Tanto Elster como Foucault denuncian lo negativo de la existencia de las normas y las instituciones cuando se limitan a la disciplina y el castigo sin sentido. 

La libertad y la justicia están en estrecha relación; por ello Ratzinger (2000:33-34) señala lo siguiente:

Una libertad cuyo único argumento consistiera en la posibilidad de satisfacer las necesidades no sería una libertad humana, seguiría recluida en el ámbito animal...el concepto de libertad reclama, por su misma esencia, un complemento que le proporcionan estos dos nuevos conceptos: lo justo y lo bueno...es propio de la libertad la capacidad de la conciencia para percibir los valores humanitarios fundamentales que atañen a todos los hombres.  

 Por tanto, y como se dijo en el ensayo 2, cuando lo moral se reduce "al árbol que da moras" o la democracia relativista de hombres sin convicciones, es comprensible que los autores de los textos base del tema como cualquiera de nosotros nos surjan cuestiones como las siguientes: 


¿Es justicia política del gobierno en turno cuando asegura la condena de su(s) opositor(es) político(s), mediante la elección a dedo del juez? (Elster, 2010: 469) 


¿Es justo desprenderse de sus cualidades de ser humano para vivir acorde a la libertad de la época actual en la que hablar de moral es equivalente a fanático intransigente?
  

Conclusiones


El lado obscuro que miran y detallan los tres autores sobre las relaciones grupales entre humanos, sin duda que nosotros también lo vemos y quizá hasta hemos sido partícipes. ¿Es así?...¿nos agrupamos sólo para complicarnos la existencia? Definitivamente que no. Sin embargo, cualquiera que como Giddens, considere que “surge de la <<nada>> inorgánica y allí mismo desaparece”, ¿qué posibilidades hay de que mire su lado de luz?

El prologuista de Ratzinger (2000:18) dice justo lo que pienso sobre las normas y los principios de orden que permiten que un organismo o institución y cualquier agrupación humana, alcance sus objetivos:

La eticidad humana convierte al hombre en un ser abierto a un amplísimo futuro cargado de posibilidades, activo y audaz para encausar originalmente su vida por sendas inéditas, alejadas de lo trillado y consabido, y singular para rebelarse contra cualquier caprichosa regla obligatoria. 

Y entonces sí se puede hablar de instituciones valiosas, de relaciones sociales pequeñas o grandes como opción de evolución humana y no sólo como grupos delictivos, mafia organizada para manipular y abusar, etc. O dicho con vocabulario corriente: minorías excluidas y mayorías ignorantes de la cultura populista.

Referencias

Elster, J. (2010). La explicación del comportamiento social. Barcelona: Gedisa. Pp. 387-476.
Foucault, M. (1975). Vigilar y castigar. México: Siglo XXI. 199-230.

Giddens, A. (2011). La constitución de la sociedad. Buenos Aires: Amorrortu. Pp.193-253.

Marías, J. (1955). La estructura social: teoría y método. Madrid: Sociedad de Estudios y Publicaciones.

Ratzinger, J. (2000). Verdad, valores, poder: piedra de toque de la sociedad pluralista. Madrid: Rialp.

domingo, 20 de octubre de 2019

2 Animal moralista

Palabras clave: Moral; Relaciones interpersonales. 

Introducción


Algunas discusiones de nuestro tiempo sobre temas que causan conflicto hasta entre los miembros de una familia o las amistades, derivados del carácter social del ser humano y que a mí me parece interesante abordar para el propósito de esta actividad es la dimensión moral de toda persona humana.

Como no conozco la trayectoria de S. Pinker he dado una mirada a su biografía para tener idea de la postura del autor y así hacer mi análisis y tomar postura respecto de lo leído.

Así, encuentro comprensible que el autor del capítulo que elegí haga sus planteamientos que tiendan hacia la negación de la moral como parte de la naturaleza humana; tal es propio de quienes desde la ciencia de la biología se refieren al homo sapiens solo como la especie del sentimiento y la razón y no más. Usualmente, sobre lo moral,  usan el tono como de S. Pinker:

“Otra característica extraña de los sentimientos morales es que se pueden encender y apagar como si de un interruptor se tratara.” (p. 439)

Efectivamente, en nuestro tiempo y bajo el supuesto real de los impactantes logros de la ciencia y la tecnología que nos colocan en condiciones de comodidad inimaginables, y cuando hace apenas unos 30 años, la telefonía se limitaba a la doméstica y nada móvil, por ejemplo, no falta quien considere  por tanto, anticuado e innecesario lo moral. 


Con algunos postulados de Pinker (véase Fig. 1) y lo que algunas personas publican en XXXX, enseguida intentaré exponer algunos argumentos sobre las consecuencias negativas de las relaciones sociales al estilo Pinker.      


Fig. 1. Postulados de S. Pinker extraídos de El animal moralista.



Lo básico sobre la moral



Catón, Armando Fuentes Aguirre, el cronista de Saltillo, Coahuila, México, suele decir que, para algunas personas, “la moral es el árbol que da moras.” Yo considero que dice mucho de verdad.

En el marco delineado en el primer ensayo sobre las relaciones sociales, continuamos ahora con una breve exposición de la confusión que provoca la ignorancia, el desinterés y la negación de la dimensión moral natural en las relaciones humanas. Y para ello haremos uso de conceptos básicos desde la ética y que a su vez toma los fundamentos de la antropología y la metafísica.

Ocampo Ponce (2002:137) dice sobre las relaciones del ser humano con sus semejantes que:



La ética-política es una de las ciencias filosóficas más importantes tanto por la luz de sus principios como por la finalidad de sus aplicaciones ya que el fin de ésta es la contemplación de la verdad en sus principios para la realización del bien común, es decir, para que la persona y la sociedad obren de tal manera que se logre la plena realización de todos y cada uno de los miembros de la sociedad.  

Algunos autores como García Norro (2013) denominan relativismo moral a toda postura que convierte al hombre en la medida de todas las cosas, incluida la verdad. y esto sucede cuando alguien como Pinker usa vocablos como "animal moralista" puesto que ya con ello deja ver que su propuesta se coloca incluso al extremo opuesto de Ocampo Ponce Y garcía Norro. Luego, sin praeambula fidei entre Pinker, los autores citados y yo, que coincido con los citados, el discurso que viene ha de ser opuesto a los postulados de Pinker.


Lo animal de nuestro tiempo


Cuando  S. Pinker habla de "...cosas que han adquirido un tinte moral hace muy poco" (p. 441): los pañales desechables, la comida rápida, etc., sin ponerlo en duda sino recordando la definición de moral de Catón, considero que es una muestra de la confusión y del relativismo moral que con amplitud expone García Norro (2013).

Las relaciones sentimentales en el trabajo, nada nuevas y pese a las guías y códigos de ética obligatorios en ámbitos privados pero también públicos, dan idea de las complicaciones y hasta conflictos que acarrean cuando alguien excede los límites de lo laboral. Pinker, a su grupo de colaboradores ¿les permitirá olvidarse de los excesos de moral y los alentará a que den rienda suelta a sus "conexiones sociales humanas"?

En mi ejercicio sobre relaciones sentimentales sí/relaciones sentimentales no en el trabajo, con mi grupo de amigas y por la facilidad de respuesta, y como nos sucede en otros asuntos en los que la moral algo tiene que ver; todas dijimos que no tiene nada de malo. Sin embargo, cuando pregunté si su pensamiento era el mismo para sus parejas, en su ambiente o incluso para quienes ambos trabajan en el mismo lugar, ya la respuesta fue: "...bueno, no es malo para quienes son libres o..." Es decir, mientras se trate de la vida de los demás ¡hagan lo que quieran! pero en la mía yo sé, y puede que sea distinto. 

Pese al tiempo de conocernos, las 11 amigas y yo, y a  la historia de vida que cada quien tiene, puedo decir que algo de anticuado tenemos. No somos de las mujeres que se relacionan con personas comprometidas y hasta donde sé, ninguna ha hecho más de una relación al mismo tiempo. 

A propósito dejé fuera a las personas conocidas que sé que no solo han tenido una o varias relaciones sentimentales en el trabajo sino que también han llevado una o varias relaciones al mismo tiempo y no siempre con personas libres.  En mi ámbito laboral actual, el sector público, todavía este comportamiento no es bien visto. Si no se les rechaza abiertamente sí son tema de conversación general. Es decir, que por  más que nos empeñemos en abrir más nuestra mente y vivir acorde a la modernidad, sin costumbres medievales o de dioses de fantasía que todo prohíben, parece que nuestra naturaleza humana se niega a desaparecer.

Válida para todo México y desde el año 2018 se hizo pública la Cartilla moral; en la página 8 se lee lo siguiente:

No todo está permitido. Lo excluido es aquello que está mal, que causa mal. El bien es benéfico, y el mal es maléfico.

Nada académico el vocabulario y sin referencia a S. Pinker.



Conclusiones


El relativismo está presente en nuestra vida y somos muy felices hasta que nos toca vivir en carne propia las consecuencias de tanta libertad en nuestros actos o de los actos de otros que agreden o irrumpen nuestra vida.

Si el postulado de Pinker en el que se refiere a un exceso de moral en nuestro tiempo fuera principio de vida a seguir en el mundo, ¿qué sería de nosotros? Supongo que pasaría lo mismo que a las culturas tan brillantes como la griega y la romana.

Que los pañales desechables y la comida chatarra sean temas de profundo estudio ético-moral en nuestro tiempo y no el aborto humano, es una señal de confusión de valores y producto de la promoción del relativismo moral.

Cuando el ser humano en lo individual se concibe solo como biología, carne y emociones y así se relaciona con los de su misma especie y a ninguno le molesta su animalidad, queda bien lo de animal moralista y el dicho de Catón sobre el árbol que da moras.

<<Lo social nos aparece adscrito sólo a los hombres>>7. El <<otro>> se revela o se manifiesta, su presencia  es totalmente distinta de la de las cosas...El otro irrumpe en mi existencia mediante la epifanía del rostro.8 (p. 245)
Finalmente, Lucas Lucas (2005), quien no se conforma con su simple trabajar-alimentarse-consumir, su biología, nos refiere a la naturaleza humana trascendente y en la que la moral es una de las bases para superar la biología y el conflicto entre los de su misma especie.  


Referencias


García Norro, J.J. (2013). Relativismo moral. En Fernández Labastida, F., Mercado, J. A. (editores). Philosophica: Enciclopedia filosófica on line, Recuperado de 

Lucas Lucas, R. (2005). El hombre, espíritu encarnado. Compendio de filosofía del hombre. Salamanca: Sígueme.

México. Secretaría de Educación Pública. (2018). Cartilla moral. Recuperado de 

Ocampo Ponce, M. (2002). Las dimensiones del hombre: un estudio sobre la persona humana a la luz del pensamiento filosófico de Santo Tomás de Aquino. Valencia: EDICEP.

Pinker, S. (2003). El animal moralista. En La tabla rasa: la negación moderna de la naturaleza humana. Barcelona: Paidós.

domingo, 13 de octubre de 2019

1 Lo social


La realidad social como grupo, comunidad y red - Ensayo

Palabras clave: Conexiones humanas; Sociedad. 

Introducción


Como en otras épocas, y lo constata la historia de la humanidad, donde haya personas habrá diferencias. Diferencias de estatura, de color de piel y entre las más complejas diferencias, las que tienen que ver con opiniones, motivaciones y modos de hacer algo.

La persona humana individual y su apertura al mundo para conformar con otras personas, pequeñas o grandes sociedades como la familia o las ciudades, a pesar de sus diferencias, es el tema que se aborda desde la propuesta de las redes sociales o redes humanas.

Enseguida se presentan algunas ideas y conceptos de los autores indicados en la literatura base para el tema, así como de autores de cosmovisión cristiana que desde la antropología filosófica hacen planteamientos que a mi criterio ofrecen mayor solidez al estudio de la naturaleza relacional entre seres humanos.

La realidad social: MacNeill y MacNeill (2004); Caldarelli y Catanzaro (2014); Searle (1997)


McNeill, J. & McNeill, W. (2004) proponen una visión de la evolución humana a través de las distintas conexiones que ponen a unas personas en relación con otras y que ellos denominan redes humanas (p. 1).

Es interesante desde la perspectiva moderna del lenguaje que usan y que me lleva a la perspectiva de G. Nuñez (en su reseña del libro de los McNeill) con la web y network. Sin embargo, ¿realmente se trata de una propiedad nueva del ser humano? O bien, los McNeill se refieren a lo que otros autores, quizá menos modernos y desde la antropología filosófica (Domínguez Prieto, 2005; Prieto López, 2008) llaman la dimensión social humana o de apertura al mundo y que se asemeja a las conexiones sociales sobre las que discurren los autores citados. A saber: parentesco/familia, las S.A., las S.A. de C.V., asociaciones filantrópicas, las sociedades/asociaciones científicas, por regiones, por continentes, etc.

El lenguaje/comunicación, la agricultura, el transporte, la imprenta...aprendizaje=evolución humana, son evidencia que todos reconocemos como logros de la suma de habilidades para un bien común, aunque también, resultados negativos de variada magnitud como lo registra la historia de México y la historia universal.

Caldarelli y Catanzaro (2014), cuando "miran al mundo a través de las redes", de las interacciones simples y complejas como las de los ecosistemas o la distribución del virus de la gripe; imaginar tales fenómenos u otros de la misma naturaleza permite comprender mucho de su propuesta como networking. Es decir, como sistemas autoorganizados o sin control externo que se desarrollan y que alcanzan objetivos o resultados ¿inesperados? Internet, por ejemplo.

Entre todos los casos de interacciones que explican estos autores, el de la red de palabras me resulta de particular importancia por la conexión, justo, con los MacNeill cuando también le otorgan al lenguaje un lugar sobresaliente entre los hechos que evidencian la evolución humana.
Depredadoras o mutualistas, dicen los autores citados, pueden ser las interacciones en un ecosistema. De nuevo, la idea se asemeja a las asociaciones de actividad filantrópica o de delincuencia organizada, de los McNeill.

Searle (1997) por su parte, dice que “…el lenguaje es esencialmente constitutivo de la realidad institucional” (p. 75); en donde, realidad institucional corresponde a “los hechos institucionales [que] sólo pueden existir dentro de las instituciones humanas. (p. 45). Ejemplo: “…que Clinton sea [haya sido] presidente. (p. 45). En contraste a los hechos institucionales y en el mismo párrafo citado este autor refiere los “…hechos brutos, como el hecho de que el Sol esté a 150 millones de kilómetros de la Tierra…”.

El lenguaje como factor de determinante de las conexiones humanas que alcanzan resultados de alto nivel


El espacio y el tiempo para este ensayo solo permiten un esbozo de la importancia del lenguaje en la evolución de la humanidad. 

La palabra escrita y que según un propósito "X" puede convertirse en lo que conocemos como literatura científica y si agregamos la palabra oral, también en el ámbito científico, casi ya tenemos una red de comunicación científica. Y así puede irse convirtiendo en algo muy grande y vulnerable a la vez. Otras redes, como las de transporte, las de telefonía celular, la banca comercial, etc., son ejemplo de redes muy importantes en la vida humana y que si fallan, llevan al caos a otras redes humanas llamadas comunidades, ciudades o regiones.  

Los McNeill, Caldarelli y Searle usan un lenguaje de la época posmoderna para hacer un recorrido por la historia de lo propiamente humano como el lenguaje, para hablar de sí mismos y de los otros, agrupados en distintos tamaños y con fines distintos. Algo semejante cuando algunos estudiosos se dedicaron a mirar los sistemas de la realidad natural en la naturaleza humana y desarrollaron toda una teoría de los sistemas y para distintos ámbitos también: en la administración, el enfoque sistémico de terapia familiar, etc.

El lenguaje como factor que lleva a la evolución también puede llevar a lo contrario, a la confusión y al estancamiento o pérdida de habilidades en la comunicación, por ejemplo, y que sin duda puede afectar negativamente la interacción colectiva humana.  La pérdida de capacidad lectora, en niños y adolescentes hábiles con dispositivos móviles, suena a tragedia humana. Un niño que no pueda comprender lo que lee estaría limitado en su reflexión y por tanto, ¿cómo podría generar nuevo conocimiento?

La literatura científica en cualquier área del conocimiento humano es evidencia concreta de un proceso cuya exigencia, sistematicidad y rigor solo pocos pueden llevar a cabo. Es evidencia de una sincronía en el tiempo y el espacio de redes humanas; la validación del conocimiento previo, la innovación presente y con miras al trabajo futuro, nuevo también y sin límites espacio temporales.

El trabajo científico es un ejemplo de conexiones humanas con resultados de alto nivel y de impacto mundial.

Conclusiones



Interesante, sin duda, las propuestas de los McNeill (2004), Caldarelli (2014) y Searle (1997) solo que sigo con la idea de que su aportación al conocimiento del ser humano se enfoca en atribuirle a la dimensión social humana características de áreas del conocimiento humano como las redes neuronales, las redes de cómputo y todo tipo de redes, que rápidamente se han incorporado a la actividad humana.



La realidad de hoy es impactante para quienes como yo, que nacimos el siglo pasado y sin telefonía móvil, nos negamos a veces a hacer compras en línea porque nos gusta ir a la tienda de zapatos y mirar los colores y tocar la textura y calzarnos y mirarnos al espejo antes de comprar. La idea de que son productos distintos no es lo que nos detiene sino la ignorancia o hasta el temor de lo que es una red de cómputo y la industria que las soporta y soportan o, si cabe, el desconocimiento de la realidad institucional a la que se refiere Searle (1997).



Afortunadamente el lenguaje, la comunicación y el aprendizaje son ámbitos en los que la irrupción del desarrollo tecnológico ha dado beneficios que facilitan la integración de grupos, comunidades y redes de colaboración científica, por ejemplo. Entre ellos, Research Gate, Academia, Google Académico, Red CLARA. Y en lo que a educación se refiere, la educación a distancia es un hito en la historia de la humanidad pese a que, a mi juicio, todavía no se le aprovecha y quizá por el mismo motivo que aun no hay compras electrónicas masivas. Por lo menos en la región de América Latina. 



¿A qué se debe la existencia de redes mundiales de estafadores en los sitios web de servicios para encontrar pareja, de robo de datos en las transacciones comerciales o, de plagio en la investigación científica? Los autores base para el tema hacen énfasis en las conexiones o interacciones humanas y para un bien común; las que no, quizá hace falta tener en cuenta la naturaleza humana individual, la interioridad y la esencia humana completa que se pone en acción en las relaciones interpersonales que promueven la plenitud (Domínguez Prieto (2005:23), pese a las carencias de cada persona. 

La persona humana en lo individual es compleja; en familia, más. Y la complejidad aumenta en proporción al número de personas que se agrupan aunque el bien común sea su punto de unión.  


Ser social es una necesidad natural humana y al mismo tiempo cada persona vive según su naturaleza. Es decir, para algunos es de carácter vital las relaciones/conexiones a través de Facebook y cualquier plataforma similar; para otros no. Unos y otros poseen la necesidad de relación con los de su misma especie. 


Referencias


Caldarelli, G. & Catanzaro, M. (2014). “Mirar al mundo a través de las redes”. En Redes: una breve introducción. Madrid: Alianza editorial. Pp. 11-82, 99-66.

Domínguez Prieto, X.M. (2005). Para ser persona. Madrid: Sinergia.

McNeill, J.R. & McNeill, W.H. (2004). “I. El aprendizaje humano”. En Las redes humanas: una historia global del mundo.  Barcelona: Crítica.

Prieto López, L. (2008). El hombre y el animal: nuevas fronteras de la antropología. Madrid: BAC.

Searle, J.R. (1997). "Lenguaje y realidad social". En La construcción de la realidad social. Barcelona: Paidós.